Mientras los remolcadores llevaban el barco de regreso al puerto el 14 de septiembre, las agencias de noticias estatales rusas afirmaron que había repelido el último ataque de drones navales ucranianos, pequeñas embarcaciones explosivas que durante meses habían estado embistiendo a los barcos navieros rusos en el Mar Negro. Esta vez, los funcionarios ucranianos agregaron un giro, diciendo que sus fuerzas habían utilizado un "arma experimental" además de drones.
En una entrevista, el arquitecto del innovador programa de drones navales de Ucrania dijo que el ataque marcaba un hito en la guerra: el barco ruso había sido deshabilitado por una mina colocada por una embarcación no tripulada ucraniana que lo había remolcado unos 250 millas antes de regresar al puerto.
"Antes, los drones navales se usaban principalmente para vigilancia o logística", dijo el General de Brigada Ivan Lukashevych del Servicio de Seguridad de Ucrania, la principal agencia de seguridad e inteligencia del país. "Estamos haciendo muchas cosas que nadie en el mundo ha hecho".
Ucrania ha hundido o dañado alrededor de una veintena de barcos rusos de todos los tamaños utilizando drones explosivos o minas entregadas por embarcaciones de bajo perfil del tamaño de un pequeño bote de pesca. Los drones marinos causaron graves daños a un puente desde Rusia a Crimea ocupada que Rusia utilizaba para abastecer a sus fuerzas en Ucrania. Ucrania también ha atacado barcos rusos e instalaciones portuarias con misiles proporcionados por Occidente.
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